La sugerente entrada de Julen me ha llevado a la inquietante lectura de «La sociedad de control» de José F. Alcántara. El documento tiene mucha tela que cortar, hoy quería centrarme en el asunto de los residuos de aparatos eléctricos y electrónicos.
El autor habla, entre otras muchas cuestiones, del problema que puede suponer para las libertades individuales, especialmente para la privacidad, de distintos sistemas de control que, poco a poco, van incorporándose en nuestra vida cotidiana.
Me ha llamado la atención el asunto de la restricción digital de derechos a nivel de hardware destinado a impedir la ejecución de software o reproducción de contenidos que no tengan el visto bueno del fabricante:
«Aunque no es probable que se vaya a adoptar una medida tan impopular a corto plazo, no hay que olvidar que el sistema ha sido diseñado para que exista dicha opción y su sola existencia debería suscitar nuestro rechazo. Si necesitas un motivo importante para no comprar estos dispositivos, éste debería ser suficiente.»
En este punto, el autor habla del movimiento de «hardware libre» que enfrentaría al oligopolio de los fabricantes de componentes electrónicos (con incentivos para incorporar estos dispositivos de control), paralelo al de «software libre» contrapuesto a los oligopolios en los programas informáticos, estableciendo los pertinentes peros:
«El desarrollo de software requiere bastante conocimiento de programación, pero los requisitos económicos para comenzar a programar son muy pequeños: una computadora no supone ahora mismo una barrera excluyente si lo que queremos es desarrollar software. El desarrollo de hardware, sin embargo, requiere alta tecnología, cuyo precio es muy elevado.»
En este punto cabe hacer una pequeña reflexión sobre nuestro modelo de consumo de tecnología.
¿Qué recursos necesitamos para acceder y crear contenidos digitales? ¿Hasta qué punto las actualizaciones de nuestros equipos electrónicos se deben a obsolescencias planificadas? ¿Podríamos seguir leyendo y escribiendo blogs y wikis en el último ordenador del que nos desprendimos con un simple cambio de sistema operativo? ¿Qué requisitos son necesarios para disponer de un entorno ofimático completo?
Volviendo al título de la entrada, me pregunto ¿cómo estamos reciclando nuestros componentes electrónicos? ¿sería interesante cambiar el modelo?
Es evidente que a la industria le interesa que nos desprendamos de nuestros viejos ordenadores, los servicios de recogida los lleven a sitios donde los trituran (¿creando escasez de piezas de recambio?) y que de la pasta resultante se saquen materias primas para alimentar de nuevo la fabricación de equipos.
¿Es esto ecológico en términos globales? ¿es la forma de gestión de este tipo de residuos que maximiza el beneficio social?
Existen otros modelos, como el del sector de la automoción, que ha impuesto un mecanismo basado en la descontaminación (mediante la retirada de los fluidos) y posterior desensamblado y clasificación de componentes. Los tradicionales desguaces donde se apilaban coches viejos han pasado a ser, donde la normativa se aplica correctamente, limpios y ordenados almacenes de piezas de recambio. De chatarra a los vehículos al final de su vida útil.
¿Podemos hacer lo mismo con los electrodomésticos? ¿Podríamos hacer rentable un mercado de componentes de segunda mano? ¿necesitamos un garaje para poner el proyecto en marcha?
¿Me cambia la fuente de alimentación? Sí, se que, monetariamente, es más barato comprar un portátil nuevo que llevar el viejo a que le cambien la pantalla. Tal vez si pudiésemos encontrar pantallas de repuesto y cambiarlas nosotros mismos ¿no lo intentaríamos? ¿Y si con eso evitásemos (o al menos aplazásemos) la imposición por parte del fabricante de sistemas de control tales como sistemas de restricción digital de derechos a nivel de hardware o la incorporación de chips RFID en nuestras neveras?
Tal vez el camino del hardware libre esté en asegurar la vida útil de los equipos existentes y establecer protocolos de reutilización de los antiguos. O tal vez no.
3 respuestas a «Reutilizar componentes informáticos para ser libres.»
[…] ¿Una campaña publicitaria que aprovecha el tirón de una especie emblemática y de uno de los proyectos de software libre más populares para promocionar una tienda de música en internet? Sí, seguro, no deja lugar a dudas, y a más de uno no le seduce la idea de que Canonical esté desarrollando productos comerciales alrededor de Ubuntu… pero ¿cuanto dinero podríamos destinar al Lince Ibérico si las administraciones públicas competentes, las fundaciones ambientalistas y asociaciones ecologistas dejasen de pagar licencias de software privativo y se pasasen a software libre? Eso por no hablar de distribuciones que alargan la vida útil de tu viejo PC. […]
Hola mirando tu portal me haye con esta gran informacion, que por cierto me gusto bastante, te aplaudo por esto, estare al pendiende a mas informacion que estes escrbiendo en tu web… saludos
[…] impresoras 3D en casa pero que quieren ayudar y se manejan con la tecnología, instalando -en esos equipos a reutilizar– soluciones de software libre que atienden las necesidades concretas que profesores y alumnos […]