Si duda lo más importante que he aprendido en los días de mi vida. Sin libros, ni cursos, ni catedráticos o compañeros con dilatada experiencia: ocurrió allí, sin más. Un 25 de mayo de 2006, junto a mi pareja, sentados en un banco, en una calle de nuestro barrio, junto a un jardín, mano a mano con 200 gramos de pipas. La verdad me fue revelada, todo encajaba por fin y la vida volvía a cobrar su sentido. Que lo sepa todo el mundo:
ES MÁS DIVERTIDO COMER PIPAS JUNTO A UN HORMIGUERO
Pruébenlo antes de que esté prohibido, si es posible, en compañía.
5 respuestas a «Es más divertido comer pipas junto a un hormiguero.»
Muchas gracias por tu post, me ha levantado el ánimo ahora que lo tan, tan bajito.
Gracias a ti.
Coge fuerzas, que en cuanto salga el sol voy a por 200 gramos de pipas.
[…] flexible deja tiempo para sorprenderse a uno mismo ampliando vocabulario, oteando horizontes, comiendo pipas junto a un hormiguero, sensibilizando al personal, o haciendo ñapas para los amigos o no tanto, con o sin lucro, pero […]
[…] y 442 comentarios. Los números indican que no le dedico demasiado tiempo. Se sabe que es más divertido comer pipas junto a un hormiguero. Los datos, que no serían posibles sin los que están al otro lado, también reflejan una escasa […]
[…] eso, domingo gris, no apetece salir a comer pipas y me he decidido a cambiar un poco el blog. Lo más evidente: el aspecto. He cambiado la plantilla. […]