Estoy que trino con lo que leo en la prensa: Madrid rebaja impuestos y se reserva perdonar faltas muy graves a Eurovegas. Así, con la que está cayendo, uno lee que el negocio del señor Adelson va a estar prácticamente exento de pagar impuestos, que se le va a financiar con 9.000 euros por puesto de trabajo y que se le van a adaptar no se cuantas leyes. Resulta curioso porque no hace mucho se podía leer en la prensa que en la Comunidad de Madrid se están cerrando hoteles por exceso de oferta ¿la solución es gastarnos dinero público en construir más? Lo que no entiendo es qué hace la patronal del sector que no está en la calle. Quizá tiene miedo de seguir los pasos del que fuese el líder.
No hay dinero para pagar la sanidad y educación públicas, pero sí que lo hay para favorecer los negocios del amigo Adelson: le regalamos suelo, le financiamos el chiringuito y le pagamos el sueldo de los trabajadores. Pero no se preocupen, es porque va a reactivar nuestra maltrecha economía… Pues resulta curioso leer que a la gallina de los huevos de oro también le afecta la crisis: ha ingresado un 18% menos en el último trimestre. Quizá sea algo puntual, quizá la tendencia de un negocio dependiente de un modelo económico insostenible.
Que no, que en su página web dice que todo es muy sostenible: pide que se le eximan de cumplir leyes básicas en lo que a las personas y el medio ambiente se refiere… pero échale un vistazo al «Sands ECO360º Global Sustainability Strategy» y dime que no es un proyecto ecológico. Eso sí que es una organización responsable: trabajadores sin derechos, no contribuye a la distribución de la riqueza que podría suponer pagar impuestos y no respeta la legislación local. Un aplauso a la creatividad, por favor.
Porque si aplicamos la normativa española vigente, transpuesta de las directivas de la Unión Europea, habría que someter a evaluación de impacto ambiental el proyecto antes de anunciarlo a bombo y platillo. Posiblemente, si estamos justificando un interés estratégico, quizá deberíamos ver si le aplica la evaluación de planes y programas. Y dice la ley que cuando estén abiertas todas las posibilidades de participación pública e incluyendo una alternativa cero.
Tal y como están las cosas, visto cómo ha evolucionado el modelo del pelotazo y lo que se nos viene con un petróleo cada vez más caro, quizá la mejor manera de contribuir al desarrollo regional sería que no se llevase a cabo el proyecto de Eurovegas. Una evaluación global e independiente seguramente revelaría que no es rentable y que va a ser el próximo ladrillazo, el enésimo proyecto abandonado en nuestra geografía, eso sí, a cuenta de la deuda soberana. Quizá podríamos invertir el dinero en financiar un modelo que permitiese adaptarnos a los retos que vamos a enfrentar en un futuro inmediato. Pero claro, con líderes que llegan al poder de revote, y no tienen ninguna esperanza de mantenerlo a medio plazo, sólo caben soluciones cortoplacistas: Viva EuroVegas.
Una respuesta a «¡Viva EuroVegas!»
[…] claro que la creación de actividad económica y empleo es un argumento de peso. Pero la oferta de ocio, alojamiento turístico y espacios de congresos en Madrid hace mucho tiempo […]