El plástico es un contaminante que encontramos cada vez más en lugares insospechados. Un nuevo estudio científico llama la atención sobre la toxicidad de las partículas de plástico que llegan hasta nuestros pulmones.
El plástico no desaparece mágicamente, su degradación origina partículas cada vez más pequeñas: microplásticos, cuando miden menos de 5 milímetros, y nanoplásticos, si miden entre 1 y 100 nanómetros. Estas partículas son arrastradas por el aire y forman parte del polvo, tanto al aire libre como dentro de nuestras casas y lugares de trabajo.
La interacción entre estos nano y microplásticos (NMP) con las células del tracto respiratorio amplifica la susceptibilidad humana a un espectro de trastornos pulmonares como la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (epoc), la fibrosis, disnea, asma o la formación de nódulos.
El estudio “Transport and deposition of microplastics and nanoplastics in the human respiratory tract” muestra que un gran porcentaje de NMP puede transportarse, depositarse y causar daños en zonas profundas de pulmón.
Por ejemplo, pequeñas cantidades de poliestireno pueden dar lugar a la formación de radicales hidroxilo, alterando químicamente la funcionalidad del pulmón mediante afectación a los surfactantes que mantienen la capacidad de intercambio gaseoso en los alveolos pulmonares. Otros NMP pueden llegar a restringir la función ventilatoria causando cambios fibróticos en los tejidos pulmonares.
Este estudio sobre la dinámica del transporte de nano y microplásticos, aporta datos sobre las diferencias en los patrones de deposición a lo largo del tracto respiratorio humano bajo diversas condiciones respiratorias.
Igualmente contribuye a la identificación de puntos críticos de deposición específicos en las vías respiratorias. Si bien los fragmentos más grandes se concentrarían más en el segmento anterior de la cavidad nasal, los NMP más pequeños se depositan de manera más uniforme por toda la vía aérea.
Por otro lado, los microplásticos no esféricos tendrían propensión a una penetración pulmonar más profunda en comparación con los microplásticos y nanoplásticos esféricos.
Los hallazgos del estudio llaman la atención sobre la necesidad de evaluar los riesgos para la salud asociados con las enfermedades respiratorias por exposición a NMP. Estos conocimientos son esenciales para el desarrollo de estrategias específicas destinadas a mitigar posibles problemas de salud, riesgos y garantizar intervenciones sanitarias eficaces.
El trabajo recuerda que una parte de todas estas partículas plásticas se ha fabricado intencionalmente y se ha añadido a una amplia gama de cosméticos y productos de cuidado personal como a algunas pastas de dientes. También destaca que los textiles sintéticos son la principal fuente de partículas plásticas en el aire ambiente interior, siendo la degradación de botellas, de envases de comida y de la ropa sintética ejemplos relevantes del origen del plástico que flota en el aire exterior.
Referencia:
Xinlei Huang et al, Transport and deposition of microplastics and nanoplastics in the human respiratory tract, Environmental Advances (2024).